LEYENDA DE LA LAGUNA DE AKUÁN
En la parte alta de la hacienda de Catudén, en la provincia de Contumazá, antes perteneciente al territorio del poderoso curaca Guzmango, se halla el lugar ahora denominado Akuán. Allí, hace muchos años, era señor el poderoso Tanta Rica, cuya hermosa y joven hija era cortejada y pretendida por los más apuestos y principales señores de las comarcas vecinas, sin que ella manifestara por ninguno de ellos la menor inclinación. Uno de esos días se presentó ante Tanta Rica un hombre sumamente pobre, vestido con ropa rota, vieja y con llanques muy gastados, probablemente por su mucho caminar, para pedirle hospedaje por unos días.
El curaca Tanta Rica, hombre bueno y justo, dio hospedaje al forastero que dijo llamarse Akuán. Algunos días después, Akuán se presentó nuevamente ante Tanta Rica y, para sorpresa de éste, le manifestó que en los días de su permanencia se había percatado de que su territorio sufría escasez de agua por lo que él le proponía poner una laguna en la parte alta del cerro.
De este modo tendría agua en cantidad suficiente como para regar todas las tierras aptas para cultivo pero, a cambio, Tanta Rica debía comprometerse a cederle en matrimonio a su hija.
El señor pidió un tiempo prudencial para meditar sobre el extraño trato que le proponía el mendigo y forastero Akuán, en quien Tanta Rica observó un poder sobrenatural que emergía desde su propia mirada. Pasaron algunos días, días de grandes preocupaciones, temores y aflicciones para Tanta Rica, quien tenía que resolver entre obligar a su hija a desposarse con un mendigo o disponer de agua abundante para el bienestar y el progreso para su pueblo. Al fin, una mañana hizo llamar a Akuán y le manifestó que había resuelto acceder a su petición, mas le amenazó con mandarlo matar en caso de que incumpliera los términos del compromiso.
Akuán abandonó la aldea, sin que nadie pudiera precisar el momento en que lo hiciera, y desde entonces pasó mucho tiempo sin saberse ninguna noticia de él. Tanta Rica, pensando haber sido objeto de una burla por parte del extraño mendigo, desesperado decidió en que su hija se casara con el poderoso señor de una tribu vecina.
Mas una noche, los moradores del lugar escucharon un extraño y ensordecedor ruido, como si un río caudaloso dejara correr sus aguas en incontenible corriente haciendo bramar como dice la gente de Cajamarca cuando un rio viene sobrecargado en las lluvias que ni el rio Rimac en Lima iguala como hablador.
Sorprendidos y temerosos, muy temprano se levantaron para cerciorarse del origen del ruido escuchado y encontraron a Akuán, ya no cubierto de trapos remendados sino convertido en un apuesto señor, elegantemente vestido con muchos adornos de oro y piedras preciosas que cubrían su cuerpo, Akúan, luego de saludar a todos y de entrevistarse con Tanta Rica, pidió que le acompañaran a una planicie cercana que se había transformado en una gran laguna cuyas aguas discurrían torrentosas por la falda del cerro.
Ante la sorpresa y la alegría de los pobladores que aclamaban a Akuán como a su salvador, este dijo a Tanta Rica: “Yo he cumplido con mi ofrecimiento, ahora te toca a ti cumplir con tu palabra”.
El curaca, consternado, le explicó que, perdidas las esperanzas de su regreso, había autorizado el matrimonio de su hija con otro hombre, Akuán, resentido, desapareció definitivamente en medio de la laguna, la misma que comenzó a secarse hasta quedar convertida en una hondonada, en donde hasta ahora se escucha como si un río dejara correr sus aguas de manera subterranea en el interior de la tierra.
Actualmente Tantarica es un distrito de la provincia de Contumazá a 2 hrs de Cajamarca, por ello me permito felicitar la iniciativa de promover este concurso entre nosotros los escolares porque lamentablemente la agenda ambiental y el agua no es prioridad en el país.
Fuente oral: Rodolfo Ravines, Provincia de Contumazá
Escolar: Ramiro Melber Chuquilín Hernández, 14 años, Cajamarca
Asesor: Yessica Chuquilín Prado
PRIMER CONCURSO ESCOLAR NACIONAL
Hace 13 años